Ubicada al norte de la provincia de Jaén, La Carolina es un municipio singular cuyo origen se remonta a 1767, cuando fue fundada como parte del ambicioso proyecto de repoblación de Sierra Morena impulsado por el rey Carlos III. Este plan, dirigido por el ilustrado Pablo de Olavide, tenía como fin asentar población en zonas estratégicas y peligrosas, como el paso de Despeñaperros, para mejorar la seguridad y fomentar el desarrollo económico. Colonos centroeuropeos, principalmente alemanes, flamencos y suizos, se establecieron en la ciudad, aportando una herencia cultural que aún se percibe en su trazado urbano y tradiciones.
El diseño de La Carolina sigue un modelo racional ilustrado, con calles amplias y cuadriculadas, edificios institucionales y plazas públicas, destacando el Palacio del Intendente y la Iglesia de la Inmaculada Concepción. En el siglo XIX, la ciudad vivió un auge económico gracias a la minería del plomo, dejando como legado un importante patrimonio industrial.


Hoy, La Carolina ofrece una interesante propuesta turística que combina historia, cultura y naturaleza. El Museo de La Carolina, ubicado en el antiguo Palacio de Olavide, permite al visitante conocer a fondo el proyecto de las Nuevas Poblaciones y la historia minera local. La ciudad también forma parte de la Ruta de los Castillos y las Batallas, por su cercanía al escenario de la batalla de las Navas de Tolosa.


Además, su entorno natural, en plena Sierra Morena, invita al senderismo y al turismo rural. Espacios como el área recreativa de La Aquisgrana, en la que se encuentra el Aula de Interpretación de la Minería de la Asociación ACMICA, y las antiguas rutas mineras ofrecen experiencias únicas. La gastronomía basada en productos de caza y aceite de oliva completan una visita con identidad propia.

Visita obligada a su museo

El Museo de La Carolina, integrado en el majestuoso edificio del Palacio del Intendente Olavide, ofrece innumerables posibilidades de conocimiento, cultura, historia e investigación de la ciudad. Reúne una completa colección de materiales fabricados y empleados en la antigüedad más remota, pudiéndose admirar la evolución tecnológica en la industria lítica, la cerámica, el arte y los metales, así como conocer su vida cotidiana. Destacan las piezas del Neolítico por la admirable perfección que alcanzaron en la talla de la piedra, y la colección de Cultura Ibérica que cuenta con una rica variedad de cerámicas decoradas, exvotos, armamento y falcata, monedas y reconstrucción de enterramientos masculino y femenino. Asimismo, de la Edad Media y de la célebre Batalla de las Navas de Tolosa en 1212, se exhiben piezas originales (puntas de flecha, de lanza, virotes, chuzos, puñales, herraduras, espuelas, abrojos, etc.). Otra de sus salas está dedicada a conocer con detalle la fundación de las Nuevas Poblaciones de Sierra Morena y Andalucía y, por otro lado, la actividad minera en La Carolina, donde podrán conocer cómo fue la actividad minera y sus repercusiones en el distrito. Además, en el Aula de Interpretación de la Minería de la Asociación ACMICA en el área recreativa de La Aquisgrana, encontramos una importante y excepcional colección de piezas, recuerdos museográficos y multimedia. Lo más destacado de esta Aula es la recreación a escala real de una galería y frente de mina de plomo.