El nuevo Clase C de Mercedes-Benz suma enteros

El Clase C, la serie de turismos más vendida de Mercedes-Benz, acomete su quinto año de producción con amplias modificaciones. Los elementos estéticos predominantes de la reestilización se sitúan en el frontal del vehículo, así como en la configuración de los faros y las luces traseras. Celebra también su estreno una nueva estructura de equipos electrónicos. El cliente percibe estas novedades en su contacto con el producto; por ejemplo, en el visualizador completamente digital del cuadro de instrumentos disponible como opción y en los sistemas multimedia con posibilidades de visualizado e información a medida. Los sistemas de asistencia a la conducción se sitúan ahora al nivel del Clase S. A ello se suman los nuevos motores diésel y de gasolina.

El Clase C de la generación actual fue el modelo más vendido de Mercedes-Benz durante su cuarto año de comercialización. En 2017 se vendieron en todo el mundo más de 415.000 unidades de la berlina y el Estate. Uno de los secretos del éxito del Clase C es la amplia variedad de modelos, que incluye dos versiones deportivas de dos puertas. Tanto el coupé, introducido a finales de 2015, como el cabrio, disponible desde verano de 2016, convencen y entusiasman a partes iguales. El Clase C se fabrica en cuatro plantas, distribuidas por cuatro continentes.

El nuevo Clase C sale a la venta equipado con una nueva generación de motores de gasolina de cuatro cilindros. Al mismo tiempo se incorpora en las variantes de 1,5 litros —C 200— un sistema adicional de 48 voltios con alternador arrancador accionado por correa.

En el mercado español se ofrecerá la renovada versión diésel de dos litros OM 654 D20 (82 x 92,3 mm) con el C 200 d y el C 220 d, que abren nuevas dimensiones de eficiencia.

El nuevo Clase C dispone de la generación más moderna de sistemas de asistencia a la conducción de Mercedes-Benz. Estos equipos prestan asistencia e interactúan con el conductor para ofrecer un nivel de seguridad activa más alto que en el modelo predecesor. El Clase C puede conducir de forma semiautónoma en más situaciones que hasta ahora. el nuevo Clase C está equipado de serie con un asistente de frenado activo con funciones ampliadas. Si lo exige la situación, este equipo puede aportar una contribución importante para evitar una colisión por alcance con vehículos precedentes que circulan a menor velocidad o que están detenidos, e incluso con peatones o ciclistas.