Uno de los objetivos principales de Fundación Anda Conmigo es llegar a todos los lugares posibles del territorio nacional, dar a conocer el valor de la integración. Para ello, el mayor valor es el deporte. Según palabras de Javier Bergón… “… Nuestra estrategia deportiva para el 2020, parte por estar integrados en dos grandes deportes como son Paddle y Baloncesto…”

Siguiendo con estos pasos, el pasado mes de mayo, Fundación Anda Conmigo, ha llegado a un acuerdo de patrocinio para dar visibilidad y concienciación, con el equipo de acción social y deportivo de SIP-AN Sport, patrocinador de jugadores de la talla de Marta Porras de Word Paddle Tour, Nº 1 en Jaén, así como en las distintas competiciones durante el próximo año en los equipos de acción social de SIP-AN Andalucía.

Por otro lado, y con carácter local en Boadilla del Monte, se ha firmado el acuerdo de colaboración y patrocinio con el Club Basket Boadilla (BCB) para crear los primeros equipos de integración de Baloncesto en Boadilla del Monte en el próximo curso 2019-2020. Bajo un modelo de trabajo combinado de entrenadores deportivos de baloncesto del BCB y los terapeutas del centro Anda Conmigo, se asegurará la correcta integración en el equipo. La presentación oficial se realizará el próximo 8 de junio a las 17 horas en el polideportivo Felipe VI.

“Debemos enseñar valores y educación social desde el deporte. Todos tenemos limitaciones, algunas más visibles que otras. Es nuestra obligación formar chavales que tengan valores de igualdad, de integración social, donde nadie sea diferente por tener una discapacidad o una limitación y lo más importante, donde todos sean un equipo, compañeros que estén unos al lado de otros en cualquier situación.” Comenta Javier Bergón en la presentación.

La Fundación Anda Conmigo nace con el objetivo de ayudar a los menores de edad y adolescentes en una situación especialmente dura para ellos y sus familias, cuando tienen una discapacidad o un retraso madurativo o cualquier tipo de necesidad terapéutica. Nuestro objetivo es poder humanizar y ayudar en los tratamientos terapéuticos que han de recibir. Un niño debería estar jugando con sus amigos, aprendiendo en un colegio y creciendo a base de experiencias y conocimiento, no recibiendo terapias y tratamientos y pasando horas de trabajo para afrontar su discapacidad.