Lo que comenzó como una forma de ensayo de cara a su formación musical y dar un poco de ánimo a sus vecinos por el confinamiento del covid-19, ha derivado, sin pretenderlo, en  vídeos virales con más de 400.000 reproducciones o en que la Televisión del Real Madrid, Radio Marca, El Larguero y otros medios nacionales se cuelen en su casa para conocer un poco más a Antonio Torres García-Villaraco. Este joven residente en Madrid, de 20 años de edad, madridista confeso pero con el corazón en Torralba de Calatrava, su pueblo, ha revolucionado su barrio, el barrio de Salamanca, con interpretaciones musicales a trompeta desde la azotea de su casa a las ocho de la tarde.

Antonio, Antoñito como le dicen cariñosamente algunos de sus paisanos, comenzó el 17 de marzo a tocar la trompeta subiendo a la terraza de su edificio, interpretando primero el himno de España para los aplausos y continuando con canciones conocidas de películas y alguna obra de trompeta que le ayudara a prepararse el examen para el grado superior de música. El 2 de mayo interpretó Los Nardos y un chotis, el 19 de marzo el himno de la Comunidad Valenciana, también el himno de Torralba y el de su patrón, el Cristo del Consuelo… pero el boom estalló cuando tocó el himno del Cuerpo Nacional de Policía, el video se hizo viral y las patrullas agradecieron presencialmente su toque a trompeta, y en abril decidió tocar el himno de la Décima del Madrid, de lo que se hicieron eco varios medios nacionales, “lo he vivido con muchos nervios, un poco sorprendido, me hicieron tocar en directo a cámara, interpreté la sintonía del programa La Tribu de Radio Marca y luego la han repetido”, nos ha contado Antonio que no da crédito a lo que le está pasando.

Sí destaca que gracias al confinamiento está conociendo a vecinos y personas que antes no conocía y, en alguna ocasión, cuando ha ido a comprar le han reconocido y le han agradecido especialmente sus interpretaciones que esperan cada día como agua de mayo, “ahora, que se puede pasear, la gente se para a escucharme”, nos ha comentado.

No obstante, él sigue con los pies en la tierra estudiando y ensayando para ese examen al grado superior de música en el Conservatorio de Madrid en septiembre, “que no es nada fácil porque hay muy pocas plazas para muchos que se presentan”, dice. En el futuro, le gustaría ser profesor de trompeta y tocar en bandas y orquestas, “soy realista, no soy muy bueno con la trompeta y es muy difícil aprobar una plaza en una orquesta profesional”, señala a Ayer&hoy. Como madridista, tiene un sueño, tocar en la reinauguración del Bernabéu tocando el himno de la Décima cuando pase esta pandemia. Desde bien niño ha sido fiel a este equipo y ha seguido la trayectoria merengue desde la peña madridista Quijote de Torralba.

“La Lira de Pozuelo me ha ayudado para decidirme profesionalmente por la música”

Pese a su juventud, Antonio Torres tiene claro que quiere dedicarse a la música profesionalmente. Empezó con diez años tocando la trompeta, su primer profesor fue Raúl Miguel Rodríguez, de Fuente el Fresno, hoy gran director internacional; ingresó en la Asociación Musical Amigos de la Música de Torralba de Calatrava con la que ha participado en multitud de conciertos, también toca con su hermandad de Semana Santa cada Viernes Santo. En Madrid, indeciso en su adolescencia hacia dónde dirigir su vida, fue guiado acertadamente por su profesor Raúl que le recomendó se uniera a la Banda Sinfónica ‘La Lira’ de Pozuelo de Alarcón, “es la única banda que ha conseguido dos veces el máximo galardón del certamen de música Ciudad de Valencia”. Solo tiene palabras de elogio para su actual banda, “Raúl me dijo que era una gran oportunidad para empezar a tocar, aprender música y también de la vida, ya que es un grupo humano muy numeroso; el director me ha dado la oportunidad haciendo uno de los conciertos de jóvenes solistas que suelen celebrar cada año”. En el conservatorio de Madrid también ha tenido grandes profesores y conocedores de la trompeta, como Manuel Blanco, natural de Daimiel, un gran trompetista; y Rafael Ramírez, oriundo de Membrilla, que “me cambió a mejor la manera de ver la trompeta y ahora con el confinamiento me está ayudando mucho”, ha indicado Antonio. Por último, ha agradecido el respaldo de todos los que le están apoyando en su formación musical.

Mucha suerte Antonio y muchas gracias.