Ésta es una historia de un hogar que ofrece el sol de mediodía y el atardecer en espera de que asome la luna. 467 metros cuadrados para contar estrellas o que ellas te cuenten sus secretos. De una entrada que de estilo habla. De un salón, donde se desarrolla la vida doméstica relacionándose con el jardín en una fascinante tensión creativa, ¡nunca verás una pareja con tanto duende! Una historia de mil metáforas en sus ventanas que relatan el paso de las estaciones, anfitrionas de luz infinita. De una cocina, de talante maternal, abraza y predispone al hechizo. Estilazo en blanco chic y minimalista. En planta baja podrás disfrutar de las veladas de invierno junto a la chimenea de tu dormitorio. Un dormitorio más y un baño completan el programa de esta planta. Arriba, el espacio más íntimo de la familia, cuatro dormitorios y dos grandes baños. Estos espacios hablan de memoria, de esbeltez y mesura, de un catálogo de luces que hacen dudar si solo existen cinco sentidos. Las terrazas con vistas a la idílica piscina hacen de este hogar un destino.


El sótano, de inspiración andaluza, transporta a los días de feria, recuerda el olor a azahar de los naranjos en flor, el embrujo de los patios de Córdoba. Un sitio donde disfrutar de grandes fiestas en invierno.


En el exterior entramos directamente a Triana, un espacio único, gestado para fiestas de verano inolvidables rodeados de glicinias en flor y el ruido del agua cayendo de la fuente. Un horno y barbacoa para que la gente no desfallezca en el intento.


Pasando a través de un emparrado, junto a la cocina, nos transportamos a la Grecia antigua, con sus piscinas rodeadas de estatuas. Un espacio, donde continuar la fiesta o simplemente relajarse admirando el jardín. ¿Conocéis esa sensación cuando encuentras algo que no has buscado y descubres que nunca quisiste otra cosa? ¡Pues eso! ¡Que esta casa es toda la suerte que quieres, hecha de todo lo que te gusta y que, vestida de casualidad, cambiará el rumbo de vuestra vida! ¡Vamos, que ni en siete vidas tuvo tanta suerte un gato, porque esta casa se vende y te está buscando!.


Texto: Elena Rodríguez Tato Fotos: En venta en Begara Luxury Real Estate