La Comunidad de Madrid destinará en 2019 un total de 450.180 euros al Centro de Atención Psicosocial-Programa Mira, que asiste a víctimas de violencia de género y que ha permitido atender entre enero y septiembre de este año a un total de 415 personas, de ellas 234 mujeres y 181 menores. Estas cifras representan un aumento del 5 % en relación con el mismo periodo de 2017.

 

El Consejo de Gobierno aprobó este martes la prórroga del contrato de gestión de este recurso hasta el 31 de diciembre del próximo año, para garantizar que las mujeres que han sufrido violencia de género y sus hijos reciban el apoyo psicológico necesario para superar esta situación. El Programa MIRA es un referente en la asistencia integral a las víctimas de violencia de género, mediante terapias individuales o grupales tanto a mujeres víctimas como a sus hijos y personas dependientes. Su objetivo es facilitar su recuperación emocional y su autonomía e integración en la vida social y laboral.

A través de este recurso se presta atención a mujeres mayores de edad, víctimas de violencia de género y víctimas, en situación de especial vulnerabilidad, que hayan tenido acceso a la a la Red Integral de Atención a las Víctimas de Género de la Comunidad de Madrid y que requieren una atención psicosocial con independencia de la respuesta administrativa y judicial. La atención alcanza también a los hijos e hijas de las mujeres atendidas, que sean menores de edad y excepcionalmente, a los mayores de edad si han estado expuestos a la violencia, convivían con la mujer atendida y dependen económicamente de ella.

La Red de Centros y Servicios para mujeres de la Comunidad de Madrid cuenta con cinco centros no residenciales: Centro de atención psicosocial Programa MIRA; centro para mujeres víctimas de trata Proyecto Esperanza; Centro para víctimas de violencia sexual CIMASCAM y dos centros de día para mujeres víctimas de violencia con programas específicos dirigidos a mujeres inmigrantes (Pachamama y Ayaan Hirsi Alí). Asimismo, la Red dispone de 54 Puntos Municipales del Observatorio Regional de la Violencia de Género, que están distribuidos por toda la región.