La Comunidad de Madrid promueve la solidaridad y la formación en valores, como el respeto por las personas, la igualdad de género o la no violencia, entre los menores infractores que cumplen alguna medida judicial en los centros que dependen de la Agencia para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor (ARRMI). Y lo hace con iniciativas como una exposición sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible impulsados por Naciones Unidas que se ha instalado, en colaboración con Cruz Roja, en el centro Renasco, en Madrid.

La consejera de Justicia, Yolanda Ibarrola, ha visitado hoy la exposición y ha seguido las explicaciones que le han ido ofreciendo los menores del centro sobre cada uno de los objetivos. Con el título ‘Objetivos de desarrollo sostenible. Movilízate contra la pobreza y la desigualdad. ¡Es tu turno!’, la muestra persigue concienciar a estos jóvenes de la necesidad de actuar de forma global contra la pobreza y la desigualdad.

Ibarrola ha subrayado que el principal objetivo de esta iniciativa es “contribuir a estimular la conciencia crítica de los menores y generar una reflexión sobre si ellos, si todos en conjunto, nos comprometemos en la lucha contra las desigualdades y la forma en la que lo hacemos”. “Creemos que es importante sensibilizar sobre la relevancia de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que suelen darse por alcanzados en los países occidentales pero que aún parecen una utopía para la mayoría de los Estados miembros de Naciones Unidas”, ha añadido. La exposición incluye 17 paneles en los que se recogen los objetivos para superar y erradicar la pobreza y la desigualdad promovidos por Naciones Unidas y que se deberán alcanzar en 2030. Los paneles muestran imágenes, firmadas por profesionales de la fotografía, que reflejan la realidad, los retos y rostros que se esconden tras esos Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Esta muestra forma parte de las actividades que impulsa la ARRMI y que tienen un carácter solidario y de formación de valores, dentro del proceso de reeducación que se sigue con los menores infractores. Así, entre otras actividades, los jóvenes pueden participar en mercadillos solidarios, campañas de recogidas de alimentos, visitas a centros hospitalarios, actividades contra el bullying y el acoso escolar o deporte junto a personas con algún tipo de discapacidad, por ejemplo.

Respetar al otro

Como ha explicado Ibarrola, el valor fundamental que se les quiere inculcar a estos jóvenes es el respeto por las personas, que sirve como base para trabajar otros aspectos como la solidaridad con los más vulnerables y desfavorecidos, la igualdad de género, la sensibilización contra la violencia de género y, en general, contra todo tipo de violencia y discriminación, la educación en todo lo relacionado con la seguridad vial o la formación para un uso crítico y razonable de las nuevas tecnologías.

“Todo ello, con el objetivo final que tienen los profesionales de la Agencia que trabajan con estos jóvenes y que impulsamos desde la Consejería, que es ofrecerles una segunda oportunidad para que puedan reintegrarse en la sociedad y que cuenten con las herramientas necesarias para poder emprender con éxito esa nueva vida”, ha resumido la consejera.

El modelo de intervención de ARRMI alcanza una tasa de reinserción del 90 % entre los menores que pasan por la Agencia. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la Comunidad de Madrid es la región con la tasa más baja de infracciones penales cometidas por menores de entre 14 y 17 años por cada 1.000 habitantes. En concreto, la tasa fue del 7,4 ‰ en 2017, cifra que es un 41,3 % mejor que la media nacional. De la misma manera, Madrid es la Comunidad con la tasa más baja de menores condenados por cada 1.000 habitantes, con una cifra del 4,7 ‰, un 37,3 % por debajo de la media nacional.

La Agencia para la Reeducación y Reinserción del Menor Infractor, organismo autónomo que depende de la Consejería de Justicia, atendió el año pasado a 2.661 menores, en ejecución de 3.220 medidas judiciales. Un total de 550 menores y jóvenes participaron en acciones formativas de inserción sociolaboral impulsadas por la Agencia, de los que 224 firmaron un contrato de trabajo.