Elena Rodríguez Tato / Directora de equipo
Begara Luxury Real Estate

De los cimientos al interruptor, el abecedario de la vivienda sostenible. Éstos son algunos de los conceptos que nos ofrecen pistas para lograr una casa que produzca un mínimo impacto en el entorno, reduzca el consumo de energía y contribuya a una vida más confortable e inteligente.

La buena arquitectura es sostenible por naturaleza. Esta afirmación lleva implícita una crítica sutil al recurso indiscriminado a la etiqueta “ecológico” que de alguna manera, enmascara una forma de diseñar y construir mediocre.

Lo que os propongo aquí es una guía para recobrar la senda de una arquitectura sensata, con un pie en la sabiduría tradicional -la que no necesitaba preguntarse si lo que construía era sostenible – y otro en el aprovechamiento de la tecnología más moderna. Lecciones condensadas en términos que vierten luz y ayudan a ordenar ideas para que podamos vivir mejor no sólo nosotros, sino también los que vengan detrás.

ENERGÍAS RENOVABLES: Generosidad natural.

Es un hecho que a las energías renovables les queda todavía mucho recorrido en el ámbito doméstico.

Hay que vencer inercias en la industria y el propio consumidor, sobre todo en lo que concierne a la inversión inicial en equipamiento. Pero la recompensa lo merece: son recursos limpios y casi inagotables que nos proporciona la naturaleza. Además, por su carácter autóctono contribuyen a disminuir la dependencia -tanto nacional como particular- de los suministros externos.

BIOMASA: materia orgánica originada en un proceso biológico, espontáneo o provocado, utilizable como fuente de energía. Ejemplo: los pellets con que se alimentan algunas estufas domésticas.
BIOMCASA: programa del IDAE para el impulso de la biomasa como fuente energética. Las instalaciones financiadas a través de él ofrecen al cliente condiciones ventajosas, como un ahorro mínimo del 30 % en la factura energética.

EÓLICA: energía obtenida del viento, que es transformada en electricidad mediante generadores. Dada su intermitencia, a nivel doméstico se utiliza normalmente como fuente energética de apoyo a la red de suministro convencional.

FOTOVOLTAICA: electricidad generada directamente a partir de la radiación solar. No hay que confundirla con la energía solar térmica (ver más abajo). Se usa principalmente para autoabastecimiento de viviendas aisladas.

GEOTERMIA: calor acumulado por la tierra a determinada profundidad, utilizable para la climatización de la casa. La gran inercia térmica del suelo permite disponer de ella todo el año.
TERMOSOLAR: aprovechamiento de la energía del sol para generar calor con el que cocinar alimentos o producir agua caliente sanitaria.

CONSUMO ENERGÉTICO: carrera por la eficiencia

Quizás sea en el aspecto del consumo energético de los electrodomésticos donde son más visibles los progresos logrados en materia de ahorro y eficiencia. En la clasificación energética es habitual encontrar A+++ y no encontrar clases inferiores menos eficientes.

En cuanto a la iluminación, la sustitución progresiva de las lámparas incandescentes por electrónicas de bajo consumo y, especialmente los LED, aportan ahorros de hasta el 80% con una longevidad entre 8 y 20 veces superior.

Para gastar menos en agua existen recursos como los reductores de caudal (aireadores), los pulsadores de doble descarga en cisternas y grifos termostáticos.

Y en el caso de la climatización hay soluciones, como el suelo radiante -que utiliza agua a una temperatura inferior de las de los radiadores- o la bomba de calor aire agua, que usa una fuente gratuita y renovable el aire exterior, de probada eficiencia energética. Muchos de estos gestos tienen un coste reducido o prácticamente nulo y, sin embargo, con ellos podemos lograr ahorros de energía de entre el 20 % y el 60 %.

BITÉRMICOS: electrodomésticos que tienen tomas de agua fría y caliente diferenciadas, lo que evita el uso de resistencias para calentar el agua.

BOMBA DE CALOR: equipo que permite refrigerar en verano y calentar en invierno, simplemente invirtiendo el ciclo de funcionamiento. Su elevada eficiencia radica en que produce hasta cuatro veces más energía de la que consume.

CALDERA DE CONDENSACIÓN: caldera que aprovecha el calor de la condensación de los humos de la combustión, con un ahorro de energía y de emisiones de óxido de nitrógeno y dióxido de carbono.

ETIQUETA ENERGÉTICA: sistema de información uniforme sobre el comportamiento energético de los electrodomésticos.

GENERACIÓN DISTRIBUIDA: producción de electricidad por medio de muchas fuentes de energía cercanas a los puntos de consumo, como paneles solares y aerogeneradores domésticos.

REFRIGERACIÓN DUAL: sistema de refrigeración que utiliza dos compresores diferenciados para el frigorífico y el congelador, reduciendo el consumo.